¿Qué es la hepatitis? Según la OMS, la hepatitis es una inflamación del hígado. Esta inflamación, puede remitir espontáneamente o evolucionar hacia una enfermedad grave y crónica.

¿Por qué es tan importante la función del hígado?

El hígado regula la mayoría de los niveles de sustancias químicas de la sangre. Toda la sangre que sale del estómago y los intestinos llena de nutrientes,  pasa por el hígado, que se ocupa de procesarla y separar sus componentes;  Los aprovechables los equilibra y crea los nutrientes y los que hay que desechar, por no ser aprovechables o por ser incluso tóxicos. Éstos por medio de la bilis son enviados al intestino y, finalmente salen del cuerpo en las heces. Los que se excretan por la sangre son filtrados por los riñones, y acaban saliendo en forma de orina.

El hígado, junto con el riñón y los pulmones, son los tres órganos que trabajan filtrando y limpiando el cuerpo de sustancias nocivas. Por eso su función es tan importante.

Tipos de hepatitis

Se han identificado cinco virus de la hepatitis designados por las letras, A, B, C, D y E. Todos causan enfermedades hepáticas:

La hepatitis A y la E son causadas generalmente por la ingestión de agua o alimentos contaminados. Sus síntomas suelen ser leves y en la mayoría de los casos con un periodo de incubación de 16 a 60 días.

Las hepatitis B, C y D seque se transmiten a través de la sangre, la saliva o el semen. Por ejemplo, por una transfusión de sangre, en el caso de la hepatitis B, la transmisión de la madre a la criatura en el parto o de un miembro de la familia al niño, y también el contacto sexual.  Tienden a ser crónicas y entre sus síntomas destaca la ictericia. Su periodo de incubación es de 50 a 180 días.

Hepatitis autoinmune

Otro tipo de hepatitis, no muy frecuente que se da cuando debido a causas desconocidas el sistema inmunitario del cuerpo ataca las células hepáticas. Se cree que factores genéticos y ambientales con el tiempo interactúan y ocasionan la enfermedad.

Afecta a todas las edades y a ambos sexos, pero es más frecuente en mujeres entre los 10 y 50 años. Los síntomas más comunes son el cansancio, molestias abdominales poco precisas, dolores articulares, prurito, ictericia, hígado agrandado y arañas vasculares en la piel.  Si además, hay cirrosis hepática puede haber liquido en la cavidad abdominal y estado de confusión mental.

Suele ser una enfermedad crónica, con brotes graves. Pero cuando se diagnostica y se trata a tiempo, es posible controlarla con medicamentos que inhiben el sistema inmunitario. Un trasplante de hígado puede ser una opción cuando no hay respuesta a los tratamientos farmacológicos, o en casos de enfermedad avanzada.

Hepatitis A

La hepatitis A es causada por el virus de la hepatitis A. Puede ser muy contagiosa por lo que es fácil contraer el virus o contagiar a otra persona. La hepatitis A es diferente de otros tipos de hepatitis ye que generalmente no es tan grave como la hepatitis B o C y no suele evolucionar a hepatitis crónica o cirrosis.

A veces el virus está en el sistema de 2 a 6 semanas antes de que aparezcan los síntomas. Este es el momento en el que es más probable el contagio:

  • Náuseas
  • Vómitos
  • Ictericia (la coloración amarillenta de la piel y la parte blanca de los ojos)
  • Fiebre baja (fiebre de hasta 102 °F)
  • Fatiga
  • Dolor abdominal, especialmente del lado derecho
  • Orina oscura
  • Pérdida del apetito
  • Dolor muscular
  • Picazón

Estos síntomas pueden ser relativamente leves y desaparecer en pocas semanas, pero a veces, la infección por hepatitis A ocasiona una enfermedad grave que dura varios meses.

Como evitar el contagio.

Pregunte a su médico, pero la vacuna es segura para niños a partir de 1 año de edad y puede proporcionar protección por hasta 20 años.

Además, lavarse bien las manos con jabón y agua antes y después de cocinar, usar el baño y de cambiar pañales. Lavar frutas y vegetales antes de comerlas y evitar carne y pescado crudo o poco cocinado.

Si hay alguien cercano con hepatitis A y nunca ha tenido el virus ni se ha puesto la vacuna, debe consultar con su médico de inmediato. Recibir una vacuna contra la hepatitis A o una inyección de inmunoglobulina (un anticuerpo) en un plazo de dos semanas desde la exposición a la hepatitis A puede protegerte de la infección.

Gracias y saludos desde Iberomed.

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    • Depositar sobre las manos humedecidas, suficiente cantidad de producto para producir espuma.
    • Frotar durante 5 minutos insistiendo en uñas y espacios interdigitales con cepillo y aclarar con agua.
    • Secar con toalla desechable o rollo de papel.
    • No utilizar en personas sensibles a sus componentes, ni durante tiempo prolongado.
    • No mezclar con otros productos. La materia orgánica disminuye su eficacia. 

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